Castaños y Aragoni, Francisco Javier. Duque de Bailén (1758-1852).
Militar español, nacido en Madrid el 22 de abril de 1758 y muerto en la misma ciudad el 24 de septiembre de 1852, que fue capitán general de los ejércitos españoles.
De noble familia, ingresa en el ejército como capitán de Infantería, en 1768, en atención a los servicios prestados por sus antepasados. Estudia en el Seminario de Nobles de Madrid, y tras diversos hechos de armas asciende a brigadier, en 1793, y a mariscal de campo, en 1795.
En 1799 su asiduidad en las tertulias de la condesa de Benavente, de clara oposición al favorito, provoca su destierro a Badajoz.
Ascendido a teniente general, en 1802. En mayo de 1808 es nombrado comandante del Campo de Gibraltar. Ante la invasión francesa, al principio acepta la autoridad napoleónica, pero en seguida se adhiere al bando patriota y llega a un acuerdo de ayuda mutua con el general inglés Darrimple. Un Decreto suyo, fechado en Utrera el 27 de junio de 1808, sobre lo perjudicial que son las prostitutas en el ejército, se publicó en Cádiz en 1808, circuló profusamente, y fue reproducido en Demostración de la lealtad española, t, II, y en Colección de proclamas.
No fue el vencedor de Bailén, pero sí el general en jefe del ejército y capitán general de Andalucía, y por tanto el que recogió los laureles. El parte en el que comunica la rendición de Dupont, dado en el cuartel general de Andújar a las 8 de la mañana, del 19 de julio de 1808, lo publica la Junta de Sevilla en Noticias del ejército de Andalucía (Cádiz, 1808), y lo mismo a las 6 de la tarde -ignoro el por qué de esta diferencia horaria- aparece en Diario Mercantil de Cádiz, número 206, del 22 de julio de 1808, los oficios de comunicación a la Junta de Sevilla se publican también en el Diario Mercantil de Cádiz., números 218 y 210, del 3 de agosto y 26 de julio de 1808, y la proclama «A los Andaluces. Después de la rendición del ejército francés en las faldas de Sierra Morena» en Gazeta Ministerial de Sevilla, del 23 de julio de 1808, y en el Diario Mercantil de Cádiz, número 211, del 27 de julio de 1808, y en CPLSa, número 17, del 2 de agosto de 1808, proclama en la que recuerda a los andaluces que han vencido a los vencedores de Marengo, Jena y Austerlitz, y les dice como españoles: «Ya tenéis una Patria: ya sois una gran Nación». Sin esta frase, la proclama aparece de nuevo en Diario Mercantil de Cádiz, número 221, del 16 de agosto de 1808.
Contribuyó a la formación de la Junta Central y del Consejo Superior de Guerra, escribiendo notables palabras al general Gregorio de la Cuesta sobre la «anarquía militar», «despotismo» y «esclavitud» que resultaría de la interrupción del proceso civil español por parte de los militares (18 de septiembre de 1808). Perdió la batalla de Tudela (23 de noviembre de 1808), por lo que sufrió consejo de guerra, que le absolvió.
Tesorero del ejército, en 1809. Presidente de la Regencia hasta la reunión de las Cortes en 1810. Firma como tal una Real Cédula, del 22 de junio de 1810, por la que se manda guarda el decreto de extinción de los juzgados de Policía y seguridad pública, y se restituye a las salas del crimen y juzgados ordinarios el conocimiento de las causas de infidencia. Una vez cesado, lo mismo que a los demás ex-Regentes, las Cortes le ordenaron, el 17 de diciembre de 1810 salir de Cádiz y la Isla, lo que provocó una Representación del interesado, ante la cual las Cortes el 19 del mismo mes aclararon que era una medida política, que «no envuelve censura ni punición».
Por la batalla de la Albuera recibió de la Regencia la gran cruz de Carlos III, el 27 de mayo de 1811, distinción que agradece el interesado, en Olivenza el 1 de junio de 1811, atribuyendo sus triunfos a la Providencia, al valor de las tropas y a la capacidad y entusiasmo de los jefes, y además al hecho de que España ha vuelto a la libertad, saliendo de la larga prostitución a que la había condenado una Corte corrompida (Conciso, 13 de junio de 1811). No obstante, García Quintana el mismo año 1811 le clasifica entre las autoridades odiadas, débiles o indolentes.
Su comunicación de la victoria de Arroyo-Molinos, dada en el cuartel general de Valencia de Alcántara, el 29 de octubre de 1811, se publica en el Redactor, número 147, del 8 de noviembre de 1811, y la orden general del quinto ejército, del 9 de noviembre de 1811, que incluye un oficio de R.Hill, dado en Portalegre el 6 de noviembre de 1811, en el que comunica la victoria sobre Girard, que aparece publicado en el Redactor, número 161, del 22 de noviembre de 1811 y número 239, del 8 de febrero de 1812, una representación A las Cortes, fechada en el cuartel general de Fuentes de Oñoro, el 9 de enero de 1812, en favor de «Los patriotas castellanos», sin nombres, de los que se dice que habían jurado a la fuerza al gobierno intruso.
Capitán general de Galicia, en 1812, publica las proclamas «El capitán general del reino de Galicia, a sus ilustres habitantes», en el Redactor, número 325, del 4 de mayo de 1812, El general … a su ejército, en el Redactor número 387, del 5 de julio de 1812, que tiene tres vivas: a la nación, al rey y a la Constitución; y «El general…en Santiago, a sus tropas», en el Redactor, número 413, del 31 de julio de 1812. Wellington le nombró general en jefe del ejército del Mediodía, que incluía al 2º, 3º y 4º ejércitos.
Consejero de Estado, Lorenzo Calvo de Rozas le acusó ante las Cortes y ante el país, y publicó su nombre como criminal, infractor de las leyes, de la Constitución, y de lo establecido por las propias Cortes, en Verdades apoyadas en documentos auténticos, mayo de 1812, y Diario Mercantil de Cádiz, número 91, del 30 de septiembre de 1812.
A la muerte del marqués de la Romana se hizo cargo del 5º cuerpo de ejército en Extremadura, con el que contribuyó a las grandes victorias de Arapiles, Vitoria y otras. En diciembre de 1812 asistió en Cádiz al baile que la Regencia dio en honor de Wellington. Un artículo firmado F.X.C., en el Redactor, número 870, del 1 de marzo de 1813, sobre la falta de caballos en España, pudiera ser suyo.
Su Despedida del ejército, en el Cuartel general de Tolosa, el 8 de agosto de 1813, y la disputa con Juan O’Donojú, que le obliga a incorporarse al Consejo de Estado, se publica, con otros documentos, en El Patriota, número 21, del 25 de agosto de 1813.
Consejero de Estado y capitán general de Cataluña, condecorado con la gran cruz de San Hermenegildo y de San Fernando, en 1815.
Camarista nato de la Cámara de Guerra, en 1817 su nombre se hace odioso a los liberales por ordenar la ejecución de Lacy en Mallorca y firmar la muerte de otros constitucionalistas. Dio un bando para prevenir la extensión a España de la peste argelina, y a la vez la contención del contrabando, en Barcelona el 21 de noviembre de 1817, y otro sobre la obligatoriedad de la vacuna, también en Barcelona el 23 de mayo de 1818.
El 13 de marzo de 1820, triunfante la Revolución en Barcelona, es expulsado de la ciudad. No obstante, siguió en el Consejo de Estado hasta 1822. Su posible nombramiento para la Comandancia del Regimiento de Guardias Reales Españolas produce indignación, y en la Fontana se pedirá incluso su cabeza.
Comisionado por el Señorío de Vizcaya, juntamente con José María Jusué, dirigió una Exposición a S.M., felicitándole por su matrimonio con María Cristina. Poco después el Ayuntamiento de San Sebastián le comisionó, en unión de Niceto de Larreta y de Juan Miguel de Adarraga, para que felicitasen personalmente al rey, en cuyo acto el 6 de enero de 1830 pronunciaron un discurso (publicados en Diario de Barcelona).
Durante la última enfermedad de Fernando VII presidió el Consejo de Estado, recibió del monarca en 1833 el título de duque de Bailén, y a su muerte reconoció a Isabel II, y aunque no tomó parte activa en la guerra civil, llegó a suceder a Argüelles como tutor de Isabel y Luisa de Alabarderos.
Murió poseyendo, además de las citadas, las grandes cruces de Carlos III, en 1811, Real Orden Americana de Isabel la Católica, en 1815, Legión de Honor y Toisón de Oro.
Bibliografía
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- BURGO, Jaime del. Bibliografía de las guerras carlistas y de las luchas políticas del siglo XIX. Pamplona, 1978. 2ª ed.
- Catálogo Els gnoms n. 105, 1997.
- Conciso, cit. y nº LXIX, 30 de diciembre de 1810.
- Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo-Americana. Madrid, 1908 y ss. Reed. en 1973 y ss.
- Diario de Barcelona,13 y 14 de enero de 1830.
- Diario Mercantil de Cádiz (cit.)
- Diccionario de Historia de España. 2ª ed. Madrid: Revista de Occidente, 1968. 3 vols.
- Gazeta Ministerial de Sevilla, nº 16, 23 julio de 1808.
- Las Glorias nacionales. Grande Historia Universal de todos los reinos, provincias, islas y colonias de la Monarquía Española, desde los tiempos primitivos hasta el año de 1852. [vol. I]. Barcelona, 1852-1854.
- GIL NOVALES, Alberto. Las Sociedades patrióticas. Madrid: Tecnos, 1975.
- Impugnación que hacen los individuos que compusieron la Suprema Junta Central al Manifiesto de Capitán general Don Gregorio de la Cuesta. Cádiz, 1812.
- PÁEZ RÍOS, Elena. Iconografía hispana. 2ª ed. Madrid, 1966.
- El Patriota, n. 21, 25 de agosto de 1813.
- Redactor general de España, cit. y n. 528 y 605, 23 noviembre 1812 y 8 febrero 1813.
- RIAÑO, Camilo. El Teniente General Don Antonio Nariño. Bogotá, 1973.
A. Gil Novales
Autor
Fuente. http://www.mcnbiografias.com/app-bio/do/show?key=castannos-y-aragoni-francisco-javier